Reconversión de viejas fábricas en la zona Sur
Reconversión de viejas fábricas en la zona Sur
La zona alrededor de Parque Lezama parece ser destinada a una nueva ola de reconversión inmobiliaria, con un enfoque particular en reciclar las viejas fábricas industriales. Con dos Casa FOAs en la zona en dos años (una en la antigua fábrica de Canale sobre la Avenida Martín García al 300 en 2006, y otra en la antigua fábrica textil sobre calle Lanín en 2005), el interés de inversores y inmobiliarias se ha despertado y ahora dos de las fábricas más visibles de la frontera entre San Telmo y Barracas se ven en plena construcción.
La fábrica de los bizcochos Canale fue comprada por la empresa Edelven SA, responsable por la conversión de la vieja Compañía de Fósforos en el actual complejo de oficinas Central Park sobre Montes de Oca. Parecía que Edelven iba a convertir el inmueble ícono en otro complejo de oficinas a fines de 2006, pero después de un tiempo el trabajo paró. Ahora se escuchan otra vez los ruidos de construcción desde adentro de las puertas cerradas de la fábrica Canale, pero según los vecinos de la zona los detalles y proyecciones del proyecto son “un misterio total”.
Menos misterioso es la reconversión de la yerbatera Cruz de Malta, a unos metros del primer sitio. Esta fue comprada por la empresa inmobiliaria internacional Jones Lang Lasalle, que está en el proceso de convertir sus 15.000 metros cuadrados en oficinas de primer nivel.
En una nota que apareció en La Nación el 29 de enero de este año, Shannon Robertson, director de Jones Lang Lasalle, comenta: “En Buenos Aires, después de la crisis de 2001 y 2002, hubo poca demanda y no se construyeron nuevos edificios de oficinas. Las empresas multinacionales consideraron bastante baratos los precios de oficinas operativas en la Argentina, con espacios apropiados, y plantas que puedan albergar a mucha gente”.
Otra atracción extra es su ubicación, ya que está cerca de la avenida Paseo Colón, de la autopista, de toda la movida de San Telmo, y se encuentra a metros del parque Lezama, con muchos medios de autotransporte.
“Es una zona con un excelente potencial, actualmente en pleno desarrollo. También se debe destacar el aspecto residencial, donde el mercado inmobiliario está creciendo por los muy buenos edificios que se proyectan, por lo que la zona mejorará muchísimo. No hay que dejar de destacar que está ubicada a tres o cuatro cuadras de Puerto Madero, con todo lo que eso implica”, concluye Millán, cerrando la nota mencionada arriba.
El escrito refleja la creciente tendencia a redefinir esta porción de la zona sur porteña como una prolongación de Puerto Madero. Por eso, para muchas empresas inmobiliarias extranjeras su cercanía es su atractivo de fuste.
Por el otro lado, los vecinos miran los proyectos con una mezcla de anticipación y sospecha. Para muchos, este proyecto representa una renovación del corredor entre San Telmo, La Boca, y Barracas. Rafael Salierno, dueño de un taller mecánico al lado del sitio desde 1970 comenta, “la verdad es que el cierre de la yerbatera fue una liberación para nosotros, pero todavía no se sabe si estas nuevas oficinas van ser bueno o malo para el barrio”, continúa Salierno. “Todo el mundo está con grandes expectativas de la movida que van a traer, de la gente que va venir, y de que se levante el barrio. Pero hay que esperar; a veces es grande la bomba pero son pocas las nueces” .
—Fernando Paolella y Catherine Black