¡Cumplimos tres años! … ¿Ahora qué?
Este número marca tres años de publicar El Sol de San Telmo. Parece mentira que el tiempo pueda pasar tan rápido, y que algo que empezó como un experimento inocente en la comunicación social pueda crecer y tomar vida propia –gracias a las pilas y las ganas que pusieron todos los colaboradores, amigos, anunciantes, y lectores que se sumaron a nuestra visión de periodismo comunitario-. Fueron tres años de mucho aprendizaje, llenos de errores además de aciertos, y la supervivencia del periódico siempre ha sido una grata sorpresa para mí. Como verán en la entrevista de la pág. 10, este proyecto nació como una idea bastante efímera, basada más que nada en mi deseo de afincarme en San Telmo y poder devolver algo de valor y utilidad a la comunidad que me incorporó. Ahora con diecinueve números terminados y cientos de encuentros, historias, descubrimientos y veladas plasmados en las páginas que llevan el fileteado de nuestro querido vecino y mago Martiniano Arce, podemos decir que tuvo un impacto en la comunicación y la vida del barrio, por más pequeño que fuera.
Por razones personales y circunstanciales, ha llegado el momento del cambio. Este cambio puede tomar varias formas, desde una transformación en su estructura institucional a un final del Sol de San Telmo en su formato actual. En la reunión editorial para formular este número, conversamos entre el grupo de colaboradores sobre cómo se podría encarar este cambio, y la conclusión del grupo fue muy alentadora: todos manifestaron el deseo de continuar el proyecto como un trabajo más cooperativo, repartiendo las tareas y buscando la manera de seguir publicando el periódico en su mismo formato pero con mayor colaboración horizontal.
Efectivamente este número fue confeccionado en este nuevo marco horizontal, y estoy (estamos) conforme (conformes) con los resultados. Como suele pasar en estas reflexiones grupales sobre el barrio, salió con mucho sentimiento y querencia, pero también con una diversidad de voces y notas que representa la gran variedad cultural y social que tenemos en San Telmo. No obstante, entendemos que esta nueva etapa sigue siendo un experimento en la participación, y solamente se mostrará factible a lo largo de varios meses de prueba. Vamos a ver qué pasa, y creo que lo más interesante será buscar y probar distintas maneras de organizar un grupo de personas comprometidas a mejorar su barrio trabajando en conjunto. Siempre dije y siempre diré que la
comunicación es una herramienta clave para realizar este trabajo, pero creo también que existen muchas otras y este es el momento de empezar a probarlas.
Las reuniones organizacionales son cada quince días y todos están invitados a participar (escribir a [email protected] o llamar al 15 5374 1959 para más información).
En este sentido nos parece importante ofrecer más ideas y sugerencias a través del periódico para “contagiar” al público con acciones positivas. Por eso incluimos una consigna en cada número que represente los valores que queremos desarrollar. La campaña de “sábados a las cinco” (siguiente página) es la primera consigna, e invita a todos los vecinos a tomar unos momentos los sábados a la tarde para “envecinarse” usando la costumbre de compartir un mate como puente.
También queremos invitar a todos nuestros lectores y vecinos a festejar nuestro tercer aniversario con una mateada vecinal en el Parque Lezama el sábado 30 de octubre a las cinco de la tarde en las gradas del anfiteatro. Como la mateada que organizamos en conjunto con otras organizaciones vecinales en noviembre de 2009, sólo hay que traer el mate y el termo, unos bizcochitos o facturas para compartir, y ganas de pasar un rato con otros miembros de la comunidad. Al fin y al cabo, el objetivo nuestro es tan sencillo como eso.
Gracias por acompañarnos en este camino tan enriquecedor. No sabemos dónde terminará, pero sí podemos decir que cada paso hasta hoy ha sido una maravilla y una afirmación de que “se hace el camino al andar”.
—Catherine Mariko Black
