Casa FOA 2010 en La Defensa
Entrevista con el arquitecto Daniel Silberfaden
Por Clara Rosselli
Casa Foa, el ícono de las muestras de arquitectura, decoración y paisajismo que surgió en 1985 con la finalidad de recaudar fondos para la Fundación Oftalmológica Argentina (FOA), este año se realiza en el Casco Histórico porteño. La temática será la vivienda y tendrá lugar en La Defensa, un edificio de principios del siglo XX cuya ubicación pretende conmemorar el bicentenario patrio. La restauración del edificio está dirigida por el arquitecto Daniel Silberfaden, presidente de la Sociedad Central de Arquitectos y decano de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Palermo, quien reparte su tiempo entre el diseño, la facultad y la escritura.
Cuéntenos cómo es el proyecto de reciclaje y refuncionalización del Edificio La Defensa
El proyecto comenzó en 2008 e incluyó la construcción de un edificio nuevo y el reciclaje de un edificio antiguo. En ese sentido, había que pensar en la convivencia entre un edificio patrimonial con toda su carga histórica y la incorporación de un edificio nuevo con toda su carga técnica. Claramente, ambas construcciones tienen dos lenguajes muy diferentes que fuimos igualando mediante el tratamiento de las alturas, la volumetría, la cuestión del color que intenta de algún modo «enmantecar» todo ese proyecto. Dejamos, por ejemplo, algunos muros de ladrillo que fuimos encontrando en el patio y, en fin, tratamos de contar un poco la historia a través de la textura. Además, teniendo en cuenta la importancia de los patios en la tipología original del edificio, el proyecto le pone acento al patio, incorporándole una cantidad de elementos que tienden a verticalizarlo y hacerlo más alto, más imponente.
La obra se desarrolló en dos etapas: la primera fue la construcción del edificio contemporáneo y la segunda fue el reciclaje del edificio antiguo. En ese momento apareció la posibilidad de realizar la exposición Casa Foa y aceptamos.
¿Qué consideraciones tuvo en cuenta para el reciclaje de un edificio que es parte del patrimonio histórico de Buenos Aires?
Una palabra que a mí me gusta más que reciclar es «revitalizar» un edificio. En este caso, se habían hecho pésimas intervenciones anteriores y lo que quedaba de la construcción original era la fachada y un patio que había sido muy tocado y transformado. Otros dos patios se habían perdido.
Además, estructuralmente era un edificio muy delicado, estaba al borde del colapso. Hubo que reforzar la estructura original para adaptarla a los nuevos usos.
De esta manera, hay todo un tema técnico detrás de lo que es un reciclaje que tiene que ver con la implementación de nuevas tecnologías y la necesidad de adecuarse a temas estructurales, de incendio y accesibilidad, que hacen que un edificio del siglo XIX sea posible sin tener que estar forzado a “actuar” en el siglo XXI.
Después de Casa Foa, ¿va a quedar terminado el edificio o se le va a hacer algún cambio?
Una vez que Casa Foa desarme su exposición nosotros vamos a tener unos cinco meses por delante para terminar la obra. Hemos detenido muchas cosas que tenían que ver con el programa original del proyecto (que prevé la construcción de oficinas, 18 suites y un restaurant).
¿Con qué dificultades se encontró en cuanto al proyecto y a la obra en sí misma?
Tuvimos muchas dificultades por la característica de la obra. Primero, la calle Defensa es una calle muy circulada, muy angosta, con veredas angostitas, y hacer una obra donde tenés que sacar volúmenes de tierra de excavación, meter máquinas, etcétera, llevó a que fuese una obra de logística y procedimientos lentos.
¿Qué valores fueron los que se respetaron en la refuncionalización de La Defensa?
Yo estoy muy atento a los procedimientos, la sostenibilidad, la sustentabilidad histórica o patrimonial de una obra. Con respecto a lo construido, la verdad es que hemos respetado el edificio antiguo, utilizando gran parte de los materiales con que ya contaba y en aquellos casos en que no se pudo reproducir la forma o el modo de la época hemos preferido sacar y no reponer, sino sacar y dejar como está.
¿Por qué hay una apuesta inmobiliaria en el Casco Histórico?
La pregunta abre una cuestión que tiene que ver con la riqueza patrimonial y en ese sentido Monserrat, San Telmo, Barracas mismo y posiblemente otros tienen una particular riqueza que pocos barrios de la ciudad pueden igualar. Por supuesto, existen los pros y los contras. Pero los pros son tan importantes que los contras quedan minimizados. Este edificio tiene también mucha fuerza en cuanto a contexto y contenido. Su ubicación es de privilegio, en pleno Casco Histórico.
Apostar al barrio histórico hoy parece una muy buena oferta en el orden económico y de inversión con respecto a otros barrios. Hay una mayor conciencia del tema patrimonial y creo también que los profesionales han tomado conciencia de esto.
¿Cómo debería realizarse la reconstrucción de un barrio histórico?
Me parece que el control sobre la ciudad tiene que estar basado en un planeamiento que garantice que cualquier zona tenga la posibilidad de crecer. Crecer es un destino ineludible para una ciudad porque siempre se producen cambios en los modos de habitar o porque cambia el modo de vivir o las tipologías o la cultura y la ciudad se va adaptando a estos procesos. La ciudad tiene que estar preparada para entender que esos cambios se van a producir.
Ahí viene la responsabilidad de los arquitectos.
Es muy importante que los empleados públicos, los arquitectos y los constructores entiendan que tienen una enorme responsabilidad frente a lo que hacen.
Esto es el valor que implica para todos nosotros la historia y el patrimonio y el valor de los edificios en cuanto a su significado, el anterior y el actual, considerando que hay cosas que apelan a la memoria y que en muchos casos no tienen que ver con lo tangible sino con lo intangible, con el ámbito y la escala de un barrio.
Los interesados en visitar la muestra podrán hacerlo desde el 1º de octubre hasta el14 de noviembre en la calle Defensa al 200.
Más información: www.casafoa.com
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El valor de estar de acuerdo
Por Luis J. Grossman, arq.
Como Director General del Casco Histórico, es una doble gratificación: que la edición del Bicentenario de Casa FOA sea en el Casco Histórico de la Ciudad, que se ubique en una calle y una cuadra que es muy cara a nuestro sentimiento, con el Museo de la Ciudad y la Farmacia La Estrella como vecinos, y que se haya optado por un edificio en el que tiene responsabilidad un colega de los méritos de Daniel Silberfaden.
Traducción:
To commemorate the Bicentennial, Casa FOA, the iconic show of architecture, interior design and decoration, takes place this year in “La Defensa,” a 19th century building in the heart of the Historic District. In this exclusive interview, Daniel Silberfaden, the project’s lead architect and president of the Central Society of Argentine Architects, discusses the opportunities and challenges of working within the parameters of the city’s historic heritage.
Nota originalmente publicada en TELMA: Cultura & Comunidad