La “locura” de ser bombero voluntario

Por Andrés Magariños y Roberto L. Tieri

Tenemos ganas de contarles quienes somos, qué hacemos y otra tantas preguntas que nos suele hacer la gente. Por ejemplo: ¿Cobran por ese trabajo? ¿Cuándo ves a tu familia? Entonces nos propusimos charlar con nuestros compañeros del cuartel de Bomberos Voluntarios de San Telmo y Puerto Madero y buscar algunas respuestas.

Las primeras preguntas fueron: ¿Qué les gusta de esto? y ¿Por qué quieren ser Bombero Voluntario?

Allá por el 2008, durante una salida como cualquiera, se quemaba una gomería de tal forma que tuvieron que acudir varias dotaciones de bomberos, entre ellos el Sub-comandante Nardulli y el bombero Guevara, ambos bomberos de la “Vuelta de Rocha” del barrio de la Boca, donde se producía el siniestro. En conjunto los bomberos trabajaban árduamente para sofocar el incendio, subiendo por una pared lateral con una escalera para atacar el fuego desde lo mas alto. De repente, la pared colapsó, porque detrás había tanques de acetileno que estaban envueltos en llamas y explotaron, acabando con la vida del Bombero Guevara y, un mes después, con la vida del Sub- comandante Nardulli.

Foto: gentileza de los Bomberos Voluntarios de San Telmo y Puerto Madero.

Foto: gentileza de los Bomberos Voluntarios de San Telmo y Puerto Madero.

Nunca pensaron que esa sería su ultima salida. ¿Estaban locos al querer entrar a un lugar de donde todos los demás escaparon?

Frente al interrogante, uno de los bomberos más antiguos del cuartel contestó, “será porque nos faltan caramelos en el frasco” a modo de chiste. Pero su respuesta más seria era: “Me propuse ayudar, ser solidario, arriesgar y dar la vida como ‘ese’ que se dejó matar en la cruz o ese otro que hace guardia todas las noches, velando y cuidando a tantas almas que ni siquiera lo conocen y nunca sabrán su nombre. ¿Esto significar estar locos?”

Continuando con las preguntas, llegamos al Oficial 5 Molina de guardia y le pedimos un aporte. No supo qué contestarnos pero, sin decir nada, tomó un papel y una birome y escribió: “¿Por qué bombero? Porque es mi raza ¿Por qué voluntario? Porque está en mi sangre”.

Después de esto nos dimos cuenta que nuestra investigación se había terminado… lo único que queremos agregar es que, si en nuestra raza y en nuestra sangre corre la “locura” de ser bombero, entonces sí, estamos locos.

logo_web*Participante en una clínica de periodismo comunitario que realizó El Sol de San Telmo con los Bomberos Voluntarios de San Telmo y Puerto Madero durante el mes de agosto, 2011. Este proyecto se puede realizar gracias al apoyo de la Embajada de los Estados Unidos en Argentina.

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