Club Atlético San Telmo, 111 años de vida
“Que el mundo sepa de San Telmo”
Un barrio nace con el esfuerzo de las personas por darle vida a un terreno sinuoso y deshabitado. San Telmo empezó a ponerse de pie a mediados de 1700 y el arribo de los extranjeros durante los comienzos del siglo XX, le dio identidad definitiva. Don Fortunato Spreafico fue uno de los italianos que habitó nuestras tierras, desde entonces. Este napolitano partió de Europa con sus siete hijos. Una de ellos, Josefa, contrajo matrimonio con Juan Francisco Pantarotto quien revolucionó la cultura deportiva del barrio al fundar -junto a un grupo de amigos, en 1904- el Club Atlético San Telmo.
Pasaron 111 años de aquel momento y su bisnieto, Nicolás Alejandro Pantarotto, recuerda su parentesco y también repasa los aportes sociales y solidarios que realiza, como actual secretario del club de sus amores.
El Sol: ¿En qué trabaja Francisco?
Nicolás Pantarotto: Trabajaba en una imprenta. Mi bisabuelo se asentó junto a su familia en una casa ubicada en Paseo Colón 1416.
De las competencias futboleras de esa época se hizo realidad el sueño. Porque el 5 de marzo de 1904 se reunieron varios jóvenes en una mesa de café y nació el San Telmo Football Club, como lo denominaron en aquella época porque se adoptaban terminologías inglesas a la vida deportiva porteña. Francisco Pantarotto asumió como primer presidente y a los pocos años se instauró el nombre oficial: Club Atlético San Telmo.
Los colores de la casaca de fútbol se crearon casi por accidente, según rememora Nicolás. “Dio la casualidad que doña Pepa (así apodaban a Josefa Spreafico, esposa de Francisco) lavaba las camisetas de los once jugadores, en su casa. En ese entonces no existían los detergentes ni otros productos especiales, sino que lo hacía con agua y jabón. Hay un dato gracioso sobre los colores, porque la camiseta original de San Telmo era blanca y azul y de tanto lavarlas fueron destiñendo hasta que quedaban azules y celestes. A partir de allí y casi por casualidad, el equipo empezó a adoptar esos colores”.
Actualmente el vínculo vecinal y familiar sigue latente, más allá de que Francisco Pantarotto haya fallecido el 19 de enero de 1921, porque Nicolás Pantarotto, abogado, hincha del Candombero y secretario del club -desde diciembre de 2014- lleva su sangre.
Pero la institución barrial no solo se destacó por el deporte sino por su preocupación social, sentimiento que aún lo distingue.
E.S: ¿Qué medidas proponen para ayudar a la gente del barrio?
Pantarotto: Lo primero es queel deporte sea inclusivo, además de representativo y competitivo. Atraer a todos los jóvenes de diversas disciplinas al club. Porque creemos que el deporte transmite muchos valores para la formación de una persona.
Para avalar esto, Nicolás -como representante del club- se comprometió a ayudar a las personas de bajos recursos y así originar un nexo con los vecinos. En 2014 creó el Departamento de Responsabilidad Social, llamado: “Telmo Solidario”.
E.S.: ¿Qué otras iniciativas sociales están en marcha?
Pantarotto: Soy coordinador de “Telmo Solidario” (junto a Marcelo Dimitrio y Petty Delgado). Nuestro propósito es tratar de unir a la gente que vive en el barrio de San Telmo con los de la Isla Maciel, porque los Candomberos tienen su estadio allí. Hicimos dos campañas solidarias: una recolección de alimentos y otra de juguetes para la “Fundación Isla Maciel”. Son pequeños pasos.
Esta relación solidaria se extiende con otras entidades: “Racing Solidario” (de Miguel Guidardini), “Fundación Maciel”, “Fundación Valdocco”, “River Solidario” y “Fundación S.O.S Infantil” (asociado con el club Boca Juniors).
Nicolás reflexiona sobre la labor comunitaria y evoca el caso de Tomás, un chico de 8 años que vive en la Isla Maciel y que sufre de leucemia. Tommy (como le dicen) hace su tratamiento en la Fundación Garrahan. El club lo ayuda haciéndolo feliz, por ejemplo: Conoció a los jugadores del plantel profesional de fútbol y recorrió la cancha de San Telmo. Según Nicolás, ese gesto posibilitó que Tommy aumentara sus niveles más aptos cuando se aplica quimioterapia.
E.S.: ¿Realizan acciones de carácter educativo, como brindar clases a los chicos más necesitados?
Pantarotto: Todavía no. Ese es nuestro gran desafío. En el futuro nos gustaría poder tener un programa social en lo educativo, veremos cómo implementarlo.
E.S.: El Club Atlético San Telmo festejó sus 111 años de vida y no solo significa fútbol sino también es sinónimo de handball, fútbol femenino, básquetbol, hockey sobre césped, boxeo, patín y taekwondo ¿Cuál es la misión del club en lo deportivo?
Pantarotto: Que el equipo de San Telmo ascienda a la Primera B Metropolitana y que la actividad sea competitiva y representativa. Hay una bandera en el estadio de San Telmo que dice: `Que el mundo sepa de vos”. Nosotros tenemos hinchas distribuidos en lugares como Estados Unidos, Israel, Colombia y Europa. Yo quiero eso… que el mundo sepa de San Telmo.
Martín Magurno