Se fue «Poder Latino»
Algunas de las cosas que se pierden, no se recuperan más. Les voy a contar esto que sucedió y sucede hoy en San Telmo, nuestro barrio histórico, desde mi balcón, desde mi lugar de admiradora del arte callejero, desde mi lugar de amante de mi barrio y agradecida por las genialidades que nos regalan los artistas a la vuelta de la esquina.
Como la mayoría sabemos, una de las características más valiosas y preciosas que tienen las calles del barrio es que, caminando y a veces sin esperarlo, nos encontramos frente a graffitis y murales increíbles, arte urbano de alto nivel, maravillas en los muros.
En la esquina de Balcarce y Carlos Calvo, en las paredes de una casa colonial antiquísima deshabitada, intervinieron los artistas uruguayos del Colectivo Licuado ( THEIC Y FITZ ) cuyas obras se encuentran en varias ciudades del país y principalmente en las calles de Montevideo, donde se pueden apreciar algunas realmente impresionantes. Hacen principalmente street art y están enfocados en pintar dando color a espacios públicos, trabajando en la investigación del entorno y logrando combinar el lugar, su cultura y costumbres con su pintura y estética. Ellos crearon esta belleza:
Cientos de fotografías sacadas por gente que -al igual que yo- se quedó conmovida con sus colores y por su energía, los inmortalizaron. En el año 2013, participando de un concurso, Maratón Fotográfica de Buenos Aires, tuve una mención a la “Mejor Fotografía por Tema” con una foto cuyo ochenta por ciento de su composición fue este mural.
Creímos imposible que alguien, a no ser por reemplazarlo por otra obra, se aventurara a borrarlo. Pero sí, alguien se aventuró o mejor dicho se creyó con derecho de destruirlo sin consultar, sin entenderlo, sin valorarlo; privándonos de su arte: El Gobierno de la Ciudad, que en su intento de “limpiar” la vía pública y de “mejorar el Casco Histórico” lo quitó.
Esto escribían los artistas en su página de internet un 19 de Abril del 2013, simbólicamente dos años exactos antes de que el pasado domingo descubriéramos la pared vacía: “En nuestra estadía en Bs. As. pintamos en el barrio San Telmo, más precisamente en Balcarce al 1000 una de las esquinas más antiguas de la ciudad. En esta ocasión tuvimos la ayuda de nuestro amigo rosarino Sebas Caba, que nos ayuda en la búsqueda del muro y en la pintada. La gente del barrio quedó copada y lo hizo sentír!”.
Los chicos que paran siempre en esa esquina, me contaron cómo el camión del gobierno de la ciudad llegó con las máquinas y la pena que les dio ver cómo borraban y despojaban a la esquina de esa obra de arte. Una vecina (Alejandra) les preguntó por qué lo estaban haciendo y cuenta que la respuesta que recibió fue: “Porque sí, porque hay que limpiar”. Y agrega “Yo pensé que en unos días vendrían otros chicos como aquellos cuatro de la otra vez y pintarían otra cosa, pero no, quedó así y, además, esta casa es muy vieja no se le puede dar tan fuerte, las paredes ya no aguantan ¿viste?”.
En fin, los santelmeños nos encontramos muy apenados por esta acción y esperamos que no siga sucediendo porque nos duele que San Telmo pierda sus cosas más valiosas y porque todavía creemos en las acciones que podemos hacer los vecinos, pero también necesitamos que desde el lugar donde se toman las decisiones se entienda -con real compromiso- lo que se debe cuidar.
Texto/Fotos: Cecilia Calderón