Bar Guebara: 18 años de continuo presente
Por Adrian Respun
En Humberto Iro. 463, donde hace casi 20 años había una óptica, se generó en los ’90 una de las más importantes movidas under de las bandas musicales de la época.
Mariano Madueña, quien es el principal encargado del bar, dice que todavía le siguen llegando revistas, propagandas y materiales de óptica que lo remiten a ese antiguo local. Nos comenta que aunque él era de Parque Patricios, “venía siempre a San Telmo como destino lógico a fines de los ’80, ya que por esta zona estaba Cemento, el Parakultural y el Balcón de la Plaza que era un lugar de rock por excelencia”.
Recuerda esos años cuando “hacía fiestas en mi casa hasta que mi vieja me dijo por qué no buscás un lugar más grande”, ya que allí no entraba más gente. Entonces se me ocurrió alquilar el local y lo denominamos Zelig, por la admiración que los socios tenían por Woody Allen. En el ’94 empezamos a tener relación con la Bersuit Vergarabat y de allí comenzará una popularidad que no esperaba, ya que después de los shows invitaban a su público a cerrar la noche”. Y agrega que también allí se filmó el video de la banda “Tomo para no enamorarme“.
En un momento fue el lugar de encuentro de pintores y bohemios que buscaban terminar el día en un reducto que los juntaba para conocer gente afín y conversar sobre los temas que los unían. Luego se transformó en bar de bandas emergentes, con teatro y performances y donde Manu Chao -cuando todavía no era solista- no fue reconocido por una chica que cuando él le dijo quién era, ella le retrucó “no te creo, todos se creen Manu Chao”. Mariano cuenta que cuando lo vio irse, salió a la calle y le dijo “no pongo tu música, pero igual está rebueno que hayas venido“.
El Guebara es referente de las movidas rockeras under de finales de los ’90 grupos que luego serán masivos: Peña pop, Jorge Pinchevsky, Hiperimpulso, Resistencia Suburbana, Electrochongo, Von Frulen, Fernando Noy, Miss Bolivia, Verbonautas, etc..
Madueña define que “El bar es inquieto …la gente me reclama que ya no es más como antes” y se divierte cuando comenta “¡¡por suerte!!, quiere decir que se está resignificando todo el tiempo, por eso no es más como fue. No quiero repetirme, por eso hago movidas de prueba con acierto y error todo el tiempo. Quiero que me reconozcan por lo que hago en la actualidad si no sucede es que el bar desaparece, no está vivo”.
Reflexiona seriamente cuando dice “me quedo con la actualidad, estoy más grande pero eso no quita que siga apostando por los cambios. Añoro solamente los derroches de energía de los 20 años, pero esto tiene energía propia. San Telmo nunca será Palermo, tiene pocos árboles. Es el barrio de la plaza seca, caótico barrio de 24 hs.”.
Por lo visto a veces no es necesario rescatar el pasado porque el presente mantiene el dinamismo y la oportunidad, como en las viejas épocas.