Homenaje a los indios que defendieron la patria y la ciudad de Buenos Aires

¡Oíd mortales!

Ciudadanos vecinos y amigos, es hora de homenajear a los primeros antepasados de estas tierras. Siempre se nos nombra, pero nunca se nos ha reconocido verdaderamente dentro de la sociedad, como los pueblos originarios de América.

Aún así, pasan los gobiernos y los indios quedamos. Hace más de 14.000 años que existimos los indígenas en nuestro territorio y llevamos ya 520 años resistiendo todo intento de genocidio, saqueo, discriminación y humillación a pesar que hemos sido los primeros en poner el pecho a las balas de los colonizadores, invasores y saqueadores y estuvimos siempre presente en cualquier gesta bélica  para defender nuestra tierra, porque esa es la verdad… es nuestra.

El acto de homenaje a los indigenas que participaron en las Invasiones Inglesas. Foto: Julieta Chaves.

El acto de homenaje a los indigenas que participaron en las Invasiones Inglesas. Foto: Julieta Chaves.

Hoy los que transitamos por el Casco Histórico donde nació la patria y habiendo pasado más de 200 años sin que ningún gobierno cívico ni militar se dignara a homenajearnos por haber sido nuestros antepasados los que defendieron el territorio querandí, luego llamado Santa Maria de los Buenos Aires y ahora  Ciudad Autónoma de Buenos Aires; sentimos que este homenaje –imaginado por la diputada porteña Adriana Isabel Montes y luego apoyado por el resto de sus colegas– a los soldados indios es una acaricia a nuestro corazón, que agradecemos.

No es casual estar pisando este lugar. Porque nosotros somos los descendientes de los valientes Caciques indios que se pusieron a las órdenes de los patriotas de Mayo, ofreciendo –sin pedir nada a cambio– 20.000 corajudos  guerreros y 100.000 caballos de las naciones querandí, pampas, tehuelches, ranqueles y otros tantos de los alrededores, para “correr” a los “colorados” (como llamaban a los invasores por su uniforme rojo).

Asimismo, acompañaron a Belgrano y San Martín en sus gestas históricas –que también fueron nuestras– y, sin ir más lejos, dieron la vida  por su tierra en la guerra de Malvinas.

Hoy se alegran los espíritus de mis ancestros: los mismos que antes se enfrentaron a Mendoza y Garay, porque ellos tuvieron que soportar y resistir al genocida de la Campaña al Desierto solventado por los llamados “patriotas” cuyos nombres figuran en localidades o calles de todo el país.

En Montserrat y aquí mismo en San Telmo mis hermanos indios se enfrentaron (en 1806/1807) al batallón pirata con un ejército conformado la mayoría por indios, esclavos y criollos. Recordemos los dichos del primer Jefe del Regimiento de Infantería Nro.1 Patricios, Cornelio Saavedra: “por suerte contamos con los indios que son hábiles en el manejo del cuchillo, la chuza, boleadoras y el combate cuerpo a cuerpo, también muy buenos jinetes”.

Celebrando el cierre del acto, convocado por la diputada porteña Adriana Montes. Foto: Julieta Chaves.

Celebrando el cierre del acto, convocado por la diputada porteña Adriana Montes. Foto: Julieta Chaves.

No es casual estar en este lugar (el pasaje 5 de Julio y la calle Venezuela) cerca de donde sepultaron a nuestro turaiki (hermano, en quechua) el Dr. Manuel Belgrano que nos defendió tanto (quizás sería por eso que no le mandaban la comida para su tropa) y quería que San Martín gobernara las Provincias Unidas del Sur (San Martín podría haber sido hijo de una india, según un libro de memorias escrito en el siglo XIX por María Joaquina de Alvear y Sáenz de Quintanilla donde se confirman rumores que recorren dos siglos de historia argentina: San Martín fue hijo del español Diego de Alvear y de una india guaraní, quien la tradición afirma que se llamaba Rosa Guarú; aunque uno de los Alvear haya quemado los antecedentes). Al Padre de la Patria también lo echaron y se fue a morir en Francia. Nuestra madre patria España está en Europa; así que somos huérfanos desde hace más de 200 años. ¿No será mucho?

Podemos agregar también en este breve historial al que hacemos referencia para demostrar lo innecesario, que Juan Domingo Perón –según el médico Hipólito Barreiro, ahijado de Hipólito Irigoyen y ex embajador–, es hijo natural de una india tehuelche.

Los soldados de reserva y bajo bandera seguimos esperando el reconocimiento histórico que nos prometieron. Se nos sigue ignorando y discriminando a los que siempre respetamos la Constitución y los derechos humanos.

¡OÍD MORTALES! … Es hora que los historiadores entiendan que nosotros somos hermanos, hijos de la tierra y el sol; lo demás es cartón pintado.

—Inti churi, aka Edgardo “Super 8” Gherbesi

Palabras también compartidas el día 31 de agosto, 2011 en el acto de y colocación de una placa de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para homenajear el papel que tuvieron los pueblos indígenas en la defensa contra las Invasiones Inglesas. De la ceremonia participaron, además de la diputada porteña Adriana Montes, el indio Quichua Querandí, José Gherbesi, el Cacique de los Quilmes, Santos Madani, el Cacique Tehuelche, Miguel Ángel Sablo, el Cacique Marumba de los Tupi Guaraníes, la Cacique Elida González, y representantes de la Asociación Indígena de la República Argentina.


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