Lo que provoca San Telmo
Jon Luko habita en Congreso pero vive (en toda la acepción de la palabra) en nuestro barrio.
Así lo expresa en su pregunta y su respuesta:
“¿Por qué en un periódico de San Telmo? Pues porque me gusta y por el carácter transitivo del amor. Tuve y tengo amigas y amigos aquí, se me da bien el barrio y quiero a mi amiga Cecilia, que vive en él. Además, pese a todo el dolor, la vida es forma, ingenio, figura, color, perfume, variedad humana y belleza. Me refiero a la feria de la calle Defensa, pero también al resto”.
Y agrega: “Este texto es parte de un libro en proyecto que, creo, se titulará: Duelos e Idilios. Ahí les va y bueno… ¡Gracias!”.
Aún atento,
en decepciones sabio pero libre,
habito las moradas del desierto y es menos el azúcar que el salitre,
y es menos la música que el silencio.
Pesa la escalera y conozco más verdades y más dudas.
La tontera que te dije un día se mantiene en mi latido.
También en el tuyo?
Conservo la felicidad en el recuerdo de tu voz y tu sonrisa.
Importa algo más?
Lejos como estamos, te evocaré aun cuando caiga la última luz,
aun cuando calle el último pájaro,
aun cuando todo, lleno de piedad, se ciña a su forma escueta,
esencial, finita, inerme, lábil, separada.
Nos reuniremos en alguna estrella, si es que queda,
de primavera no eterna,
distintos al laurel pero parientes.