Los antiguos tranvías de San Telmo

Las calles del barrio permiten  imaginar, ahora que todavía están los adoquines y los antiguos rieles, como era la zona era antes del retiro  en 1963 de los más de 1200 tranvías que cruzaban la ciudad.
El primer tranvía de Buenos Aires  funcionó a partir de 1863,  desde Constitución hasta la calle Tucumán, y si bien los comienzos del servicio no fueron exitosos, rápidamente prosperó el nuevo transporte.
El 31 de julio de 1898 se inauguró el primer tranvía eléctrico que cruzaba San Telmo. Un tal Wenceslao Villafañe había obtenido, en 1887, la concesión de una nueva línea: Plaza de Mayo-San Telmo-Flores-Liniers.
El recorrido iba hacia el Bajo por San Juan (que en aquella época era estrecha), y subía por Humberto Primo. En la esquina de Paseo Colón y Humberto Primo se construyó una usina eléctrica con cuatro calderas Stirling de 250 caballos, que producía una corriente continua de 500 voltios. La usina no tenía buenas chimeneas y, en los primeros meses, el silbido de las calderas molestaba a los vecinos. Desde allí, cables subterráneos corrían hasta Flores. El tendido de los cables aéreos causó problemas y protestas: muchas casas de Humberto Primo no tenían revoques firmes y hubo que utilizar columnas.
De frenos manuales, los tranvías tenían dos pisos: arriba eran descubiertos y adentro los pasajeros se sentaban de espaldas a las ventanas en asientos longitudinales. En cada tranvía trabajaban dos empleados: el “cuarteador” manejaba los caballos y el “mayoral” cobraba los pasajes.
A veces, los repartidores estacionaban sus carros encima de las vías y se rehusaban a desplazarlos antes de terminar sus tareas. Había protestas, insultos y riñas, que solían terminar en comisarías.
Por ejemplo, el 17 de enero de 1873, el tranvía (a caballo) corría por Bolívar hacia el Sur. Eran cerca de las nueve de la noche y varios chicos viajaban colgados de los estribos; al llegar a la altura de Independencia, el vigilante José Matío Meíz, que viajaba instalado en el piso superior del carruaje, vio a un niño tirado de espalda en la vereda y sangrando. El chico, Alejandro Pantín, acusaba al guarda del tranvía de haberlo tirado.
Todos los implicados tuvieron que ir a la comisaría 2ª. El mayoral de la empresa Tranways Ciudad Buenos Aires, dio sus explicaciones: “Empecé a cobrar en Bolívar y Belgrano; de ambos lados del coche, tanto delante como atrás, iban varias criaturas colgadas de las barandillas; vi a un niño agarrado de la de adelante, donde no hay más que media vara (43 cm) entre la vía y el cordón de la vereda que es muy alta; me bajé al estribo, agarré al niño del brazo y lo largué a la vereda; caso contrario, hubiera sido una muerte segura”. Algunas “personas respetables”* que viajaban en el tranvía, atestiguaron a favor del mayoral; Lisandro Suárez, policía de guardia, estimó que el mayoral era “hombre de muy buenas cualidades”, y firmó el acta que lo dejaba en libertad.
A los pocos días, hubo otro incidente en Defensa: un policía subió al tranvía, se rehusó a pagar el pasaje, hubo una discusión y el pasajero cayó a la calle. Allí se vio que estaba borracho y terminó en la comisaría.

*En aquellos tiempos San Telmo albergaba a la “crema” de la sociedad. Benjamín Martínez de Hoz vivía en Bolívar, cerca de Humberto Primo, y en su casa se firmó el acta fundacional de la Sociedad Rural. No desdeñaba viajar en tranvía.

—Rogelio Ponsard

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5 Respuestas

  1. hector dice:

    Tengo actualmente 74 años y desde los años 1940 a 1944 viví en San Telmo. La última casa donde vivíamos estaba situado en Defensa 1191 (ahora derribada para la ampliación de San Juan). Recuerdo el paso del tranvía 22 que iba de Retiro a Quilmes y en aquéllos entonces corría de Norte a Sur; el tranvía 20, del puerto que se desplazaba por Ingeniero Huergo y el 28 de dos troles y ocho ruedas que pasaba por Azopartodo e iba hasta Temperley.Siento nostalgias al recordar las noches en que, ya acostado y tarde de la noche, escuchaba sonido del tranvía sobretodo cuando cruzaba las vías de Defensa y San Juan. Tiempos idos que no volverán

  2. Edilberto M. Fernández dice:

    Hay un dato que quisiera rectificar:Mi bisabuelo Lisandro Suarez mal puede haber sido «policía de guardia» puesto que ya en ocasion de la fiebre amarilla ,en marzo de 1871, estaba a cargo de la Comisaría Nª 14 ( San Telmo)- el barrio azotado con más intensidad por la epidemia, como lo atestigua el cuadro de Blanes.
    Son numerosos los sitios en internet que al referirse al tema destacan la actuación que le correspondió en tales circunstancias a la Comisaría a su cargo.
    De todas formas, es interesante la cita que Uds hacen porque desconocía esa circunstancia.

  3. hector dice:

    the tramways or streetcar should return to the city.Some of the most modern cities of the world have them in the steets. Pollution might be controlled better than now when hundreds of buses bring a poisonous air that we, the users must bread in and out.

  4. Fabian SZRAJBER dice:

    Soy Fabian de 78 años. Actualmente vivo en Almagro. Llegué a ir a la Facultad en tranvía eléctrico. Medio seguro y ecológico de transporte, que obvio extraño. En la ciudad de Praga el tranvía es el medio típico de transporte urbano, si bien cuenta con 3 líneas de subterráneo. Tengo una duda: El CUARTEADOR era el que manejaba los caballos o era un apoyo para las cuestas ascendentes o lodazales? Y en ese caso cómo se llamaba al conductor del/los caballo/s?

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