Los pequeños realizan grandes logros
Los alumnos del Jardín del Instituto Integral del Sud, pichones de periodistas y directores de cine, tienen su propio medio: “El Sol del Integral”.
La maestra, Paula, de la sala Celeste, les mostró un número de El Sol de San Telmo donde había una nota referida a la escuela y les propuso que hagan su diario escolar, contando las cosas que les pasan.
Elvira Milano, directora del Instituto, comenta el germen de la idea. “Las ´seños´ empezaron a trabajar los medios de comunicación, del teléfono al whatsapp y allí surgió el tema del diario. Cada vez que había un evento, después hacían la entrevista; lo tenían todo ´aceitado´”.
Así nacieron notas con fotos, escritos y dibujos. Primero entrevistaron a la mamá de Lisandro, que es periodista. “Nos contó que a veces tienen que llevar el diario en avión a otro país” grita a viva voz un compañerito.
Las notas incluyen “cuando le dieron gorros a los egresados”, según Octavio (4); “campamentos de la sala Verde”, agrega Patricio (4); una de las nenas aclara que también “cocinaron patitas de pollo”; celebraciones de Halloween y salidas, como una muy especial que hicieron al cine Gaumont (Rivadavia 1635, CABA) donde proyectaron su propia avant premiere.
Cómo fue esa historia… Elvira relata, con entusiasmo, que las diferentes salas del jardín (catorce en total) generaron películas sobre los temas que más trabajaron en el año. “El muñeco gusano Coco de sala de dos había tomado tanta vida que se lo puso en diferentes situaciones dentro de la escuela y lo animaron con stop motion (técnica de animación que consiste en aparentar el movimiento de objetos estáticos por medio de una serie de imágenes fijas, sucesivas). Tenías que ver la cara de los chicos cuando descubrieron que su muñeco jugaba, subía a la calesita, se hamaca ¡Es impagable!”, dice.
Y agrega que otra sala jugó con las vocales de la letra de la canción “La mar estaba serena”, también con educación ambiental y la poda de árboles, animaron cuentos, la canción “El oso” de Antonio Birabent (cuyo hijo es alumno del Instituto),animales en peligro y dinosaurios.
Comenzaron a proyectarlas en la biblioteca del jardín hasta que una mamá, presidenta del INCAA, propuso estrenarla en el cine Gaumont. “Así que un sábado éramos 500 personas en el estreno de todas las películas. La reacción de los chicos viéndolas en pantalla gigante, fue espectacular” nos cuenta Elvira, orgullosa de los alumnos, los maestros y los padres que acompañaron este sueño hecho realidad.
Carolina López Scondras
