Restauración de la Pirámide de Mayo

Charla técnica en la Escuela Taller del Casco Histórico.

Soy la primera y, por el momento, la única ex alumna, egresada con el título de Oficial Yesera para la Restauración y Conservación del Patrimonio Histórico de la

Ciudad de Buenos Aires. Es un título de Oficio, que me permite coordinar este tipo de obras,

Comencé como aprendiz hasta llegar a la especialización, luego de haber tenido dos becas de la Fundación del Banco Galicia para lograrlo. Soy discípula de Casimiro Sejas López, Maestro Yesero, declarado por la UNESCO, como Patrimonio Viviente de la Ciudad de Buenos Aires.

Hace cinco años que doy  charlas a los chicos de la Escuela donde expongo la realización de diferentes obras. Son charlas motivacionales, que les permite ver que lo que aprenden allí es aplicable. En especial las obras que ellos han podido visitar en su ejecución y las diferentes técnicas empleadas en una obra real.

Los alumnos de la Escuela Taller del Casco Histórico de la Ciudad de Buenos Aires, presentaron una nota a las autoridades, al director -Ing. Fernando Caniza- y al Arq. Rubén Nuremberg (algo que yo ya les había ofrecido), para contactarme y ver la posibilidad de darles una charla explicativa de las tareas que se realizaron en la Pirámide de Mayo.

Para esta en particular, por la importancia y la relevancia de lo que representa el monumento intervenido y de la manera multidisciplinaria en que se la encaró, sumado al  entusiasmo de los alumnos y ex alumnos, ameritó que me esforzara aún más y la acompañé con láminas que mostraban el trabajo realizado paso a paso; un antes, durante y después de cada sector intervenido. Luego de la charla y del intercambio de preguntas y respuestas, la mirada sobre las fotos cambió. Comprendieron la importancia de saber por qué se utilizó una técnica en lugar de otra.

La jornada comenzó con unas palabras de presentación, agradecimiento y aclaraciones por parte del Director de la escuela, en el sentido de que hubo algunos artículos periodísticos que decían que la Escuela Taller había participado en forma directa en dicha restauración y, en realidad, no fue así ya que se contrataron de manera particular a dos maestros de la Escuela, Casimiro Sejas López y Alberto González (amigo personal), quienes trabajaron en la restauración de la Pirámide y, en la de las esculturas de mármol, ex alumnos de la escuela.

Me acompañaron en la jornada, parte del equipo que trabajó en la restauración de tan importante monumento histórico: Casimiro Sejas López, Alberto González, Branco Sejas y Rubén Fernández pero quiero nombrar también -aunque no pudieron estar presente por diferentes motivos personales- a Claudia Arbe, Inés Gómez, Tomás Martins y Claudio Torrico. Asimismo, quiero agradecer la colaboración para armar esta charla, al Director de la obra, Arq. Marcelo Magadán y al Arq. Francisco Girelli -quien aportó la parte histórica-.

Marta Zaffora

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